martes, 14 de diciembre de 2010

Un chinito en la Castellana

Por aclamación popular me veo obligada a rescatar esta historieta que es de hace un par de años pero aún es recordada por mis queridas fans...Allá va!!


Esta historia que os voy a contar es verídica, me pasó ayer y he pensado que ese pobre chinito merece un espacio en mi perfil...Iba yo felizmente conduciendo por la caótica Castellana cuando de repente se me planta delante un Citroen Xsara Verde del año pumcatapum con una L. Yo continúo tranquilamente tras él sin atosigarle considerando que es un pobre L recién salido de la autoescuela. Pero minutos después y tras un par de pirulas, despistes y cambios de carril sin previo aviso empieza a cansarme y me comienzo a plantear que sea un miembro del grupo de riesgo “mujer/abuelete/abuelilla/rubia”. En la rotonda de Gregorio Marañón, bastante caótica a las 3 de la tarde, me canso de él y le adelanto por la izquierda para comprobar que...Ohhhh! Era un pobre chinito de esos que salen en las noticias cuando cuentan que existen autoescuelas q dan clases en chino, con cara de susto, pinta de gitanillo y escondido debajo del volante mira a su alrededor pensando "¿Cómo salgo yo de aquí? Me quielo volvel a mi casita a tlansital pol los tlankilos caminitos de tiela con mi calito y mi bulo" Pero ya es demasiado tarde chinito, bienvenido a Madrid!!!! Así que nada, ahí dejo al chinito con su caos decidiendo hacia donde tirar y me piro dirección Velazquez. Al llegar a Goya encuentro en un margen de la calle a otro chinito, con cara de perdido y pienso "Coño! Lo mismo está esperando al otro" Bien, pues no se si le esperaba o no, el asunto es q me dio tiempo de ir al foniatra y volver y, cuando ya me dirigía a mi casa, voy a coger la M-30, me encuentro un pequeño tapón ante un semáforo y cuando me fijo...EL CHINITO!!!!!! 4 calles mas allá de donde le dejé y hora y media después ahí seguía el pobre oriental dando vueltas intentando encontrar su destino, estuve por pararme y decirle que las naves de chinos de Fuenlabrada no caían por ahí pero le dejé, así por lo menos conoce Madrid...

No hay comentarios:

Publicar un comentario